La sabiduría popular dice que la esperanza es la fuente del esfuerzo y la iniciativa. Con el mismo pragmatismo adaptativo a las circunstancias, conviene quitarse de encima ese sentimiento trágico que nos invade en los momentos peliagudos, por mucho que inspiren versos sublimes como: «Puedo escribir los versos más tristes esta noche».
Claro que podemos seguir discutiendo si son galgos o podencos, si el nuevo gobierno de la nación debe conservar el Ministerio de Cultura o mandarlo al baúl de los cachivaches, incluso hacer una porra sobre quien será el próximo director general del Ente. ¿Y luego? Mejor, más pragmático es tomar la palabra al Partido Popular y vigilar si el próximo gobierno cumple lo prometido en su programa. Pero, sobre todo, tomar la iniciativa para que el gobierno que nos viene haga las reformas imprescindibles para regenerar la danza en España.
Como aperitivo y ejercicio de supervisión, resumo las propuestas del programa electoral del PP que nos concierne directamente. Dice así:
1. «Modificaremos la ley de subvenciones y reordenaremos el régimen de ayudas y subvenciones, restringiendo el uso de subvenciones nominativas, e incrementando los controles y la transparencia en la concesión, ejecución y evaluación del impacto de las mismas. Definiremos criterios y procedimientos homogéneos para su concesión y su justificación.»
2. «España debe establecer un modelo cultural que facilite una sociedad creativa».
3. Promoveremos una acción cultural coordinada con la proyección exterior que proporcione a España una plataforma de visibilidad global y facilite la promoción internacional de la cultura en español.
4. Impulsaremos el mecenazgo para que tanto particulares como empresas se involucren en la financiación y promoción de la cultura, sustituyendo progresivamente el actual modelo basado en subvenciones.
5. Suprimiremos el canon digital y lo sustituiremos por nuevos modelos de gestión y retribución de la propiedad intelectual, más justos y equitativos, basados en el uso efectivo. Reforzaremos el marco legal para la protección de la propiedad intelectual e industrial.
6. Promoveremos la modernización de todas las instituciones públicas culturales, como los museos, con el fin de extender las mejores prácticas y potenciar su gestión, haciéndolas más transparentes y eficaces.
7. Impulsaremos actividades vinculadas a la promoción de la música, el teatro y el cine español. Abordaremos un nuevo marco para el desarrollo de las artes escénicas, con especial atención a los centros artísticos nacionales y a los centros de producción.
8. Revisaremos las cuestiones referentes a la formación y mejora del ejercicio profesional. Desarrollaremos medidas para el reconocimiento artístico y social de los trabajadores de las artes escénicas, la música y la danza.
9. Prestaremos especial atención a los cambios que internet está produciendo en el mundo de las industrias culturales, favoreciendo las transiciones que se operan en este nuevo marco de la globalización.
10. Diseñaremos, en colaboración con la iniciativa privada, políticas realistas y efectivas que garanticen la sostenibilidad de los numerosos equipamientos culturales distribuidos por toda la geografía nacional.
11. Impulsaremos las redes de circulación y comercialización de los productos culturales, con el objetivo de definir un mercado integrado, que multiplique las posibilidades de las empresas culturales más allá de sus comunidades de origen.
¡Ojo y al loro!